El sueño desempeña un papel fundamental en nuestro bienestar general y es crucial para mantener una buena salud física y mental. Nos permite descansar, reparar y rejuvenecer nuestro cuerpo. Sin embargo, muchos de nosotros sabemos que conseguir un sueño de calidad puede ser un desafío, resultando en mañanas somnolientas y cansadas.
En este blog, analizaremos por qué necesitamos dormir, la función del ritmo circadiano, las razones por las que nos sentimos cansados incluso después de dormir, lo que puede impedirnos conciliar el sueño cuando estamos agotados y, lo más importante, cómo mejorar nuestro sueño.
¿POR QUÉ NECESITAMOS DORMIR?
El sueño es una necesidad biológica que permite a nuestro cuerpo recuperarse y recargarse. Durante el sueño, nuestro cerebro consolida recuerdos, repara tejidos, regula hormonas y fortalece el sistema inmunológico. "Por qué dormimos: la nueva ciencia del sueño" del Dr. Matthew Walker es una lectura exhaustiva y esclarecedora sobre el tema, explicando cómo podemos aprovechar el sueño para aumentar la longevidad y reducir nuestro riesgo de cáncer, Alzheimer, obesidad y diabetes.
Los efectos del sueño se manifiestan tanto a corto como a largo plazo: una mala noche de sueño puede llevarnos a consumir más café o buscar alimentos cargados de azúcar y carbohidratos para obtener energía rápida, creando un ciclo de malos hábitos de sueño. En cambio, si duermes bien, te sientes más energizado para hacer ejercicio, más productivo en el trabajo y capaz de tomar decisiones alimenticias más saludables.
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